viernes, 19 de junio de 2009

¿MI HEROE?...¡MI PADRE!



Muy pocos hijos pueden decir hoy: "Mi hèroe es mi padre" nos hacemos la pregunta entonces: ¿Què ha sucedido con el hombre del hogar, el cabeza de su casa, el jefe, el proveedor, el guardiàn de su familia? Serà acaso que el modernismo y la vida agitada ha hecho que los valores que se deben inculcar a un niño desde su infancia han venido a quedar en las historias del pasado?




Buscando en mis recuerdos de niña, me veo asomada en la ventana, esperando siempre a la misma hora y al vislumbrar a lo lejos esa varonil presencia, correr a sus brazos y decirle:"papito ¡te quiero!


La Biblia dice en el Salmo 103:13 "Como el padre se compadece de Sus hijos. Se compadece Jehovà de los que le temen"


Siendo que el padre desde los tiempos Bìblicos ha sido la cabeza del hogar, era digno de ser imitado si èste mantenìa una relaciòn vertical (con Dios)


Como Padre, el Señor tiene compasiòn de Sus hijos, Salmos 103:13


Como Padre, el Señor cuida de Sus hijos Mateo 6:25-33


Como Padre, el Señor disciplina a Sus hijos Hebreos 12:4-11


Nadie ha tenido jamàs un padre terrenal perfecto, pero sì podemos tener un Padre celestial perfecto si nos acercamos a El como Sus hijos arrepentidos.


LUIS era su nombre, fue un renombrado atleta, reconocido nadador y su pasiòn por la que llegò a ser campeòn sudamericano: el box, aficiòn por la cual ¡mi madre oraba para que la dejara...ò perdiera!

Quien podrìa decir que este hombre rudo y valiente "derritiera" su corazòn cuando tenìa en sus brazos a esta niña que le decìa: "te quiero, papito"




Ya en el lecho del dolor y antes de partir a estar con el Señor, fue mìo el privilegio de asistirlo espiritualmente, a èste, mi hèroe quien tomado de mi mano repitiò estas hermosas palabras:"Aunque ande en valle de sombra de muerte, no temerè mal alguno porque tù estaràs conmigo..." Le dije al oìdo "¡te quiero, papito!"....y se fue.


Fue tanto el amor que le tuve, que he olvidado sus errores y solo recuerdo sus bondades.




PARA MEDITAR:

Aprendamos a disfrutar de la compasiòn de Dios


depender de Su cuidado


y someternos a Su disciplina...si queremos llegar a ser Sus hijos, recibàmoslo como Padre.


FOTO: MI PADRE EN UNA DE SUS AFICIONES FAVORITAS, EL TRABAJO.



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